domingo, 26 de febrero de 2012

Un taller de música coral sin florituras

Javier Busto nos visitó ayer junto a su mujer, Marutxi y juntos pasamos tres horas cantando y aprendiendo muchas cosas interesantes que nos iba contando de una forma muy natural. Enseguida nos dimos cuenta de que no podía ser de otra forma, él es así, abierto, sincero, espontáneo y sobre todo, convencido de lo que hace. Vive la música con pasión y eso lo transmite no sólo a través de sus partituras, sino también cuando habla de esos pequeños detalles, que para él importan mucho y que te ayudan a entender cómo tienes que interpretar su obra.
Para comenzar, nos hizo un breve resumen de su trayectoria musical y más adelante, casi al final, recuerdo que nos dijo algo que me llamó la atención: que no nos obsesionáramos con cantar, que él lo hizo y más tarde se dio cuenta que no merecía la pena, que hay que disfrutar de la vida y sobre todo ser feliz. Parece una simpleza pero a veces "lo olvidamos" .
La primera obra que eligió fue "Nerea izango zen" (Txoria txori), de lo cual se alegró mucho Marianne, la coralista alemana que estuvo unos meses con nosotros, el año pasado y que vino a Bilbao el viernes, expresamente para participar en este taller, pues le chifla esta canción e incluso se la está enseñando a sus alumnos alemanes.
Fue a raíz de esta canción cuando nos dijo Javier que nunca hay que descuidar la primera nota, que es muy importante, en cualquier entrada. Nos insistió en recalcar la melodía , sin hacer florituras, cosa que solemos hacer sin darnos cuenta, cuando son canciones muy conocidas, como ésta.
Después pasamos al "Axuri beltza", que tiene dos melodías, una para contraltos y otra para sopranos. Cuando estábamos cantando las contraltos, debió de ver a alguien poniendo cara de impotencia e hizo un comentario que me pareció curioso. Dijo que no hay nada peor para un director que ver esa cara de desesperación, que hay que ser positivo y seguir intentándolo.
También nos recomendó visitar Elizondo el día de Santiago, el 25 de julio, para ver las mutil dantzak, que están relacionadas con el origen de esta canción, que antiguamente era bailada por mujeres. Para algunos está considerada un baile de brujas o sorginak, figura muy típica del folklore vasco.
Tras un descanso para estirar las piernas, nos metimos de lleno en la historia de "A tu lado", una habanera muy conocida por todos y que algunos ya habían cantado en alguna ocasión.
Esta obra fue un encargo para el Cincuentenario del Certamen Internacional de Polifonía y Habaneras de Torrevieja (Alicante), en el 2004. El texto era de Matías Antón Mena y trataba sobre el intento desesperado de recuperar un amor perdido, llegando incluso a humillarse, cuando le dice:
"Dejame aquí como un perro,
dame comida en tu mano,
ponme ataduras de hierro
y olvida que soy humano".
En este caso la anécdota fue que Javier cuando compuso la obra no sabía cómo acabaría la historia y puso un acorde final que creaba incertidumbre. Más tarde se enteraría de que el autor volvió con su amor, al leer ella el poema. Por otro lado, no me extraña, con un final así de romántico:
"Quiéreme como a una sombra,
óyeme como a un latido,
pero deja que me esconda en tu pecho
y que me duerma en tu pecho"
Nos ha contado que no es una habanera pura, pero que tiene el ritmo metido, alternando el modo menor con el modo mayor , en las cuatro partes. Y también nos ha recomendado escuchar la versión que hace el coro Philippine Madrigal Singers, así que aquí la tenéis:

Por último hemos cantado "Maritxu nora zoaz", con las tres letras y se nos ha acabado el taller sin darnos cuenta. Ha sido una experiencia muy enriquecedora y esperamos poder seguir disfrutando, durante mucho tiempo, de composiciones tan fantásticas como éstas que hemos trabajado el sábado. Gracias a todos por acompañarnos y que os animéis a visitarnos en talleres sucesivos.
Como nos ha recalcado Javier:
¡Sed felices!

1 comentario:

  1. que buena pagina...yo este año no me apunte al taller , pero viendola casi me arrepiento....
    montxo.

    ResponderEliminar